He olvidado quién soy.

No sé cuando paso o si decidí olvidar.No sé que me motivó o cual es mi excusa.No sé de donde surgió la idea o a quien le copie el comportamiento. Realmente no lo sé.

Tengo una conclusión y una seguridad. Primero hablemos de la seguridad, debido a que es necesario para entender la conclusión. Tengo la seguridad, que innegable e irremediablemente, he olvidado quién soy.

Durante este tiempo de incertidumbre y lejos de saber quién era, surgieron varios comportamientos. No puedo decir si eran nuevos o ya aprendidos, tampoco si los consideraba correctos o equivocados, no lo sé. Sólo sé, que en esta época…

He sido rabietas y envidioso.He sido prepotente y delirante.He sido avaro y aventajado.He sido chismoso y aberrante.He sido mentiroso e indiferente.He sido la peor versión que puedo ser.

He olvidado quién soy y al mismo tiempo, encontré resultados inesperados. Concluí verdades poderosas y me llené de razones para recordar. Razones que otros me entregaron, razones que surgieron de mí, razones naturales, reales y que al final, no sirvieron para nada.

Hoy entiendo, que no sólo he olvidado quién soy, entiendo que tampoco podré recordar quien era.

Así es, no pude recordar. Me fue imposible volver a mi punto de partida, presionar el botón de restaurar. Me fue imposible porque el inicio de este camino y la ubicación del botón se perdieron por completo con mi “yo” del pasado.

He olvidado quien soy, pero también he concluido una cosa:

Quien olvida, como yo… Descubre que “no saber” es un estado sin retorno. No encontrará el camino de regreso y como consecuencia, terminará siendo forzado por la vida a construir una verdad similar a la siguiente:

Aunque no pueda recordar quién era, si puedo construir quién quiero ser. Esta en mis manos hacer de este futuro “yo” un recuerdo difícil de olvidar.

Concluyes; recorrer este camino es tan difícil como buscar un sendero inexistente en una jungla muy densa.

Concluyes; aunque haz olvidado quién eras, ese olvido no te impide caminar. No te impide abrir paso.No te impide mover tu vida y tu mente a una nueva verdad.No te impide crear un sendero nuevo, lleno de acciones contrarias a las realizadas mientras vivías el momento de máxima ignorancia.

Concluyes; que puedes cambiar envidia por bendición.Prepotencia por humildad.Avaricia por altruísmo.Mentira por transparencia.Indiferencia por importancia.Ira por serenidad.Concluyes; este nuevo reto es auto impuesto, es una responsabilidad auto generada, es un sendero que no existe y que para llegar a ser, no necesitas recordar. Únicamente necesitas arrancar la primer sección de maleza y marcar el primer paso firme.

Concluyes; el camino comenzará a tomar forma cuándo arranques la maleza de tu primer recorrido.Concluyes; el camino se acentuará si es recorrido todos los días.Concluyes; la única forma de mantener y solidificar el camino, es recorrerlo con otras personas que al igual que tú y yo, en algún punto de su vida, han olvidado quienes son.Concluyes; para este nuevo año, no necesitas recordar quien eras, Solo necesitas fijar quién quieres ser, arrancar la primera sección de maleza y dar con firmeza tu primer paso.

He olvidado quién soy, pero este olvido, me ha permitido tener claro; que tipo de persona quiero ser.

Publicaciones Similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.