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La importancia de ejercitar el cerebro como lo hacemos con nuestro cuerpo

Me han fascinado mucho los temas relacionados con nuestro cerebro y su funcionamiento. —Este blog es una prueba—

Desde que entendí la importancia de nuestra mente, busco aprender cada día más del procesador más poderoso del mundo.

Hoy quiero compartir algo que he leído hace poco y habla sobre la Neurogénesis.

¿Qué es la neurogénesis?

Es la creación de nuevas neuronas.

Mientras más activa sea una célula cerebral, más conexiones con sus vecinos desarrolla. Este proceso se llama germinación de dendritas. Una sola neurona puede tener hasta 30.000 conexiones —¡es impresionante!, lo sé— Esto crea una densa red de actividades interconectadas en el cerebro.

Las neuronas pueden ser estimuladas a través de la experiencia (real o imaginaria), indirectamente a través de las conexiones con sus vecinos y con prácticas que tienen ese objetivo específico, como son los ejercicios para el cerebro.

La actividad constante y las conexiones creadas aumentan la expectativa de vida de la célula nerviosa.

Así como el ejercicio físico aumenta los niveles de neurogénesis en general, los ejercicios para el cerebro aumentan la tasa de supervivencia de las células cerebrales y el número de conexiones que se generan entre ellas.

Ambos tipos de ejercicio, físico y cerebral, aumentan la liberación de factores para el crecimiento nervioso, lo que ayuda a las neuronas a crecer y mantenerse sanas.

¿Cómo vamos hasta aquí? Es igual de importante ejercitar nuestro cuerpo y cerebro. Enfocarse en uno de ellos solamente sería un desperdicio de nuestra capacidad de desarrollo.

¿Qué debemos hacer para aprovechar los beneficios del ejercicio mental?

La respuesta es: estimulación mental.

Retar constantemente al cerebro y exponerlo a nuevos estímulos incrementa y estimula la interconectividad entre neuronas, así como la liberación de factores para el crecimiento nervioso, ayudando a prevenir la pérdida de conexiones y la muerte celular.

Investigadores de la ACTIVE (la institución de estudios cognitivos más grande de Estados Unidos) encontraron que los incrementos en la habilidad cognitiva contrarrestan la disminución de las capacidades cognitivas a largo plazo, asociados con el envejecimiento y la demencia senil.

Los estudios demostraron que un porcentaje significativo de los 2.802 participantes de 65 o más años que realizaron ejercicios para el cerebro durante 5 semanas, empleando 2.5 horas semanales, mejoraron su memoria, capacidad de raciocinio y velocidad para procesar información.

El doctor Joe Verghese en estudios sobre el tema encontró que personas con mayor actividad cerebral tienen menor riesgo de desarrollar Alzheimer y demencia.

Una pregunta que aún permanece sin solución en este tema es si las personas que desarrollan Alzheimer son naturalmente menos activas.

Las hipótesis que surgen de estos estudios plantean que una persona podría disminuir en un 7% el riesgo de sufrir demencia con la adición de ejercicios para el cerebro, como los crucigramas y los juegos de mesa, a sus actividades semanales.

Resultados del mismo estudio indican que personas que hacen crucigramas 4 veces a la semana tienen 47% menos riesgo de desarrollar demencia que aquellos que solo lo hacen una vez a la semana.

Toma toda esta información con pinzas, porque afortunadamente mucho nos falta por conocer y estudiar sobre este tema.

A medida que salgan a la luz nuevos descubrimientos sobre el cerebro y su funcionamiento, lograremos optimizar los procesos y comprender mejor lo que ocurre en él, por ahora, algunas conclusiones son hipótesis y es una base para seguir avanzando.

Te estaré contando qué más encuentro sobre el tema, si tú estás involucrado con estas investigaciones o estás especializado en este campo, contáctame; será genial compartir contigo un café y que puedas compartir tu conocimiento con nosotros.